China rechaza otra visita de la OMS a Wuhan para investigar la teoría del laboratorio como origen de la COVID-19. #Misterio #Virus #Pandemia #China #Wuhan #OMS #Salud #Mundo #Gregoriff #UnaAlternativa1

La Comisión Nacional de Sanidad asegura que la propuesta de la organización internacional “no respeta el sentido común”

China no acepta el plan de la  Organización Mundial de la Salud (OMS) para investigar en mayor profundidad el origen de la COVID-19 y la teoría de que el virus pudo escapar de un laboratorio. En una rueda de prensa este jueves en Pekín, el viceministro de Sanidad, Zeng Yixin, lo ha descartado tajantemente, al acusar a la institución internacional de “arrogancia” por volver a poner sobre la mesa esa hipótesis que China niega con rotundidad.

Zeng se declaró «Sorprendido´´por que la OMS haya propuesto un regreso a Wuhan de la misión que entre enero y febrero de este año visitó la ciudad donde se detectaron los primeros casos de covid en el mundo, y que entre los objetivos de ese viaje se especifique la investigación de la teoría del laboratorio.

“En ciertos aspectos, el plan de la OMS para la próxima fase de investigación sobre el origen del coronavirus no respeta el sentido común, y va contra la ciencia. Es imposible que aceptemos ese plan”, ha sostenido el viceministro de la Comisión Nacional de Sanidad.

La misión Internacional de la ONU que visitó Wuhan en enero de este año presentó en marzo pasado su informe definitivo, en el que consideraba que la hipótesis “más probable” sobre el origen de la covid era el salto del virus desde un animal- posiblemente, un murciélago- al ser humano  a través de una tercera especie que hasta el momento no se ha determinado. El informe consideraba “altamente improbable” la teoría de la fuga de un laboratorio, la única sobre la que no recomendaba continuar las pesquisas.

Al parecer, para el resto del mundo debería ser suficiente que el Gobierno del país asiático asegure que el coronavirus no se escapó de uno de sus laboratorios, como ha vuelto a hacer en la comparecencia el responsable del Instituto de Virología de Wuhan, Yuan Zhiming. Según ha afirmado no ha habido ninguna fuga desde la apertura del centro en 2018: «No ha habido escape de patógenos ni infección accidental del personal».

Por eso, Zeng ha vuelto a pasar la pelota a la OMS, de quien espera una rectificación. Le pide que «abandone la injerencia política» y «revise seriamente las consideraciones y sugerencias de los expertos chinos» para tratar «el rastreo del origen del virus covid-19 como un asunto científico». Pekín se opone -ha dicho- a la politización del estudio. 

Descontento de la OMS.

Pero ya en la presentación del documento de conclusiones del equipo el 30 de marzo, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Gebreyesus, que desde el comienzo de la pandemia había recibido acusaciones de ser en exceso deferente hacia Pekín, sorprendió al expresar su descontento sobre lo exiguo de los datos que China había aportado a los científicos y al subrayar que la hipótesis del laboratorio merecía una mayor atención. Ya entonces adelantó que recomendaría el regreso de los expertos a Wuhan para profundizar las investigaciones y examinar en detalle la teoría de la fuga del virus.

Desde entonces, varios países occidentales, y muy especialmente Estados Unidos, han puesto en duda la credibilidad del informe original  y reclamado el envío de una nueva misión que estudie si el virus pudo surgir de las instalaciones del Instituto de Virología de Wuhan. A finales de mayo, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ordenó a sus servicios de inteligencia un estudio que evaluara la posibilidad de que el origen de la covid estuviera en un laboratorio, y les dio tres meses para que ofrecieran una respuesta, un plazo que acaba a finales de agosto.

 El 9 de junio la Unión Europea también abrió la puerta a esta hipótesis al declarar su apoyo a la investigación promovida por el presidente estadounidense.

La semana pasada, en una reunión a puerta cerrada, Tedros Adhanom Gebreyesus propuso que la segunda fase de la investigación sobre el origen del coronavirus ―la primera fue la misión internacional en Wuhan a principios de año― incluya nuevas investigaciones de los expertos de la OMS dentro de China, entre ellas “controles de los laboratorios o establecimientos de investigación activos en la región donde se identificaron los primeros casos de covid en diciembre de 2019”. El alto cargo internacional reiteró que “comprobar lo que pasó, especialmente en nuestros laboratorios, es importante” para determinar si la pandemia puede tener su origen en uno de ellos. “Yo mismo he sido técnico de laboratorio, soy inmunólogo y he trabajado allí. Los accidentes de laboratorio ocurren”, recordaba, “son comunes”.

La OMS ha puntualizado posteriormente que lo que se pide a China es que sea “transparente, abierta y que coopere, especialmente en la [entrega de] información, datos en bruto que pedimos en los primeros días de la pandemia”.

Pekín considera que tras esa hipótesis hay motivaciones políticas, y asegura que la investigación sobre el origen de la pandemia debe continuar, sí, pero en otros países. Como respuesta a las denuncias de Washington, sus portavoces y los medios de comunicación señalan al laboratorio militar estadounidense de Fort Derrick.

En la rueda de prensa este jueves, el viceministro chino de Sanidad pareció aludir a las acusaciones de Estados Unidos de que en otoño de 2019, poco antes de que comenzaran a detectarse los primeros casos de covid en Wuhan, tres trabajadores del Instituto de Virología cayeron enfermos con síntomas similares a los de la covid. “Ningún trabajador o investigador del Instituto se infectó con coronavirus”, sostuvo entonces Zeng.

El cambio de tono y de postura es más que evidente. Hasta ahora, la OMS le ha bailado el agua al régimen comunista. Incluso tapando sus vergüenzas cuando todo apuntaba a que Pekín ocultaba información deliberadamente. 

Como señala el informe de la CIA, China ha querido enmascarar el alcance de la pandemia desde el principio, informando de menos casos y —por supuesto— menos muertes. El organismo que dirige Teodros contribuyó con su silencio y las consecuencias son incalculables. Esto pudo hacer que otros Estados restaron importancia al virus, provocando un retraso en la adopción de medidas y en consecuencia muchas muertes que se podrían haber evitado.

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Crea un sitio web o blog en WordPress.com

Subir ↑

A %d blogueros les gusta esto: