Las playas de la capital turística registran imágenes insólitas para esta época del año

Las consecuencias de la decisión del Gobierno británico de fijar una cuarentena a los que lleguen al país desde España se empiezan a notar en la Costa Blanca. Benidorm, la capital turística por excelencia, presentaba este jueves imágenes insólitas de sus playas en pleno mes de julio. 

Según datos de la patronal hotelera de Benidorm y la Costa Blanca (Hosbec), las pérdidas tras la cuarentena británica afectaban a toda la costa alicantina y, en especial, a Benidorm. Nuria Montes, secretaria general, recordaba hace unos días que se perderían entre 200.000 y 300.000 pernoctaciones, mientras que las pérdidas económicas podrían llegar a los 200 millones de euros.

Asimismo, Montes también señaló la pérdida de medio millón de asientos en vuelos programados para el aeropuerto Alicante-Elche, «la mitad de ellos pertenecen a la turoperación». A partir de ahora, «seguramente veremos una cascada de cancelaciones y anulaciones de vuelos», aventuró.